Maridar más de treinta vinos blancos no es tarea fácil, para que
engañarnos, sobre todo si tenemos en cuenta la idiosincrasia del evento y del
lugar, por eso, es todo un honor para nosotros participar en esta singular
fiesta por tercer año consecutivo, en la que tanto los organizadores como los
bodegueros ponen todo su cariño y su ilusión.
La historia empieza mucho antes del día 2 cuando Pep sube una mañana a
Gandesa y prueba los más de 30 vinos, los cata y los analiza para encontrar
todos los matices que los diferencian unos de otros, esos pequeños detalles
casi imperceptibles que son los que hacen que para unos sean más adecuados unos
platos que para otros. Allí mismo, sin
dilación, se crea el menú maridaje, entre botas, viñas, bodegueros y mil y un aroma a flores blancas, cítricos,
vainillas, frutas tropicales, hierbas aromáticas, hierba verde y fresca, y algún que otro aire dulce y untuoso venido de los vinos
generosos también presentes.
Este año era todavía más especial se
celebraba el 25 aniversario de “la Festa
del ví “así que había que bordarlo!! Paladares exigentes o desconocedores, había
que poner nuestra singular cocina estratosférica a disposición de todos los
gustos!
Día 2 de Noviembre, a las 19h de la tarde, desenbarca todo el equipo al lugar
donde se celebraba la gran noche, espectacular, nosotros ya lo sabemos J pero os contamos que se trata de una de las 7
joyas de Cataluña, el Celler modernistade Gandesa: grande, imponente, hermoso y customizado para la ocasión con
una iluminación interior a base de cañones de luces de colores que quitaban el
hipo!
Comenzamos a disponer mesas kilométricas, listas para albergar indiscriminadamente vinos, platos y
copas, todo a punto para disfrutar de la garnacha blanca y del verdadero
protagonista de la fiesta; el pueblo de Gandesa.
Nuestro granito de arena al evento fueron diversos "aperitivos" que dispusimos
al lado de cada tanda de bodegas por tal que los asistentes pudieran degustar y
comprobar los diferentes matices que adquiría el vino al maridarlo con los
bocados:
Esterificación de oliva manzanilla
con paté de Anchoa y Rissoto
de bolets y cordero para los vinos frescos y ligeros: Mirmil.lo, Hereus, Mariol,
Clos Pinell y Clot D’Encis.
Cebiche de pescado y fruta con
sésamo negro para los vinos
frescos con evolución: Gandesola, Portal, Vallmajor y Vinyes del Grau
Mejillón al vapor con hoja de ostra
y Migas al pastor con salsa barbacoa de garnatxa y piquillos para los vinos aromáticos: Merian, Copos Blanc,
Vilaclosa, Primicia y Vall D’Exels
Conejo a baja temperatura con salsa
de frutos secos y espuma de remolacha para los vinos aromáticos evolutivos: Prohom, La Fou, Cent x Cent, Tern
Tataky de Atún Cru-Soja para los evolutivos frescos: Somdinou Jove, Sine,
Trishac y Edetana
Jamón Ibérico DO Pedroches con
gominola de aceite de oliva para
los vinos envejecidos en barrica: Somdinou CR, Quintà, Llagrimes de Tardor y
Avi Arrufí.
Bric de Cansalada viada con Arenque
y Pera para vinos con cuerpo como:
Barbara Forès, Bernabé, Ilercarvonia y Vi Francés
Y como no los dulces, nunca pueden faltar para redondear cualquier reunión,
esta vez quisimos rendir un homenaje a
los bastante olvidados vinos generosos haciendo un pequeño y divertido show
cooking elaborando Helado nitro de
garnacha dulce y por supuesto una
tanda de cacao con el Choco crunch de frutos rojos ya sabéis,
un poco a lo grande ;-) para la Mistela
de Gandesa, vino de licor de Llàgrimes de Tardor, Dolç natural de Barbara Forès
i Dolç Francés.
El resultado fue una noche con más de 500 personas disfrutando de la
velada, risas y miradas sorprendidas que revalorizaron nuestro trabajo y por
supuesto el de todos, que os aseguramos que son muchos, los que contribuyeron
un año más a convertir por una noche a la “garnatxa” blanca en estrella
indiscutible en un marco sin igual!!!